La ministra de Medio Ambiente, está teniendo un verano ajetreado. Empezó hablando de la disminución de incendios con respecto al año pasado, y poco después, Galicia ha ardido por los cuatro costados. Tras lanzar infundios, buscando culpables con responsabilidades durante el anterior gobierno, parece que ha preferido estar callada y mirando al cielo. Más que nada, por si llovía y se arreglaba los centenares de fuegos que han asolado Galicia.
Llegó a mis oídos (o a mi correo electrónico, mejor dicho) un chau-chau, con respecto a ella, que no me resisto a publicar. Desde su ministerio, se envió una pequeña biografía suya a Europa Press. Ya en sus primeras lineas, se cuentan el traslado a Italia de sus padres, en los años 60, cuando ella tenía sólo doce años de edad. Al parecer, se debió a "la complicada situación interna del país en aquellos años". Para terminar diciendo, que "su retorno a España se produjo en 1975, con la muerte del General Franco"
Así se deja entrever, que la pobre cría y su familia, sufren destierro como el Cid, debido al cruel régimen franquista. Sin embargo, nada más lejos de la realidad. El periodista Paco Narbona, como familiarmente se le conocía al padre de la ministra, fue nombrado corresponsal en Italia de Televisión Española y Radio Nacional de España. Gran aficionado de la Fiesta Nacional, destacó como escritor taurino. En el año 1975, entre otras funciones, pasa a desarrollar la dirección del Centro Regional de TVE en Andalucía, hasta el año 81 .
No parece que el periplo transalpino de su familia, fuera una cicuta amarga, en tan deseada corresponsalía. Sin duda entre las efemérides de 1975, que coinciden con el regreso a España de nuestra ministra, habrá alguna más que la muerte de Franco. Pero queda bien ponerlo, para que con un poco de imaginación del lector, se sugieran ciertos galones de antifranquista y ese plus de demócrata del que carecen otros. Existe cierto comportamiento entre cargos socialistas, por desvincular de su pasado familiar, cualquier atisbo de pertenencia a una familia, sospechosa de no combatir a Franco. Algo que sucedió, en la inmensa mayoría de los casos. Pero en esta obsesión de buscar el linaje político, la versión oficial dice que los beneficiados del franquismo, eran sólo unos. Ya se imaginan, los de la gaviota. Y si alguien no lo sabe, entrará, con un poco de Memoria Histórica y Educación para la Ciudadanía.
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