Tuve la oportunidad de asistir, a la clausura de la de unas jornadas del PP, acerca del modelo de estado. Los discursos de clausura, fueron de Soraya Sáenz de Santamaría, Federico Trillo y Mariano Rajoy. Casi treinta años después, seguimos preguntándonos el modelo, en una Constitución que pretendió dar un marco de estabilidad común a la sociedad española. Aunque no nos tiene que extrañar, en un pueblo, en el que muchos se siguen preguntando después de tantos siglos, que es España.
Rajoy dedicó mucho tiempo a hablar de España. Sí, porque muchas veces, parece que este discurso no merece tanto tiempo para los partidos, cambiándose por otros temas que importan más en el día a día, como la inmigración, la economía o el terrorismo. Pero es que estos temas, están influyendo en el propio nucleo del concepto de nación, especialmente, a través de esta reforma encubierta de la Constitución que se está dando. Habló con claridad en este tema.
Propuso dos cosas: consenso y reformas constitucionales.
Reformas, desde la lealtad a la Constitución, si bien ha mostrado fallos en temas como una excesiva descentralización. El ejemplo de Alemania o Italia, han sido elementos en los cuales, se reflejan este intento de recuperar poder, para mejorar la eficacia, palabra que sonó bastante durante estos discursos de clausura.
Consenso, tendiendo la mano al Gobierno. "Somos hijos del consenso", dijo. Aunque adelantó, que esto no le gustaría a todo el mundo. Sin duda es un debate donde el que tiene que dar pasos de acercamiento a la lealtad constitucional, es el actual gobierno. La mayoría de los socialista comparten estos valores que tienen como chasis del Estado, a la Constitución. Ójala que la dirección del actual gobierno, se acerque a esa orilla común, donde están la defensa de valores comunes a todos. Zapatero, tendría que estar más cerca de Rajoy que de Otegi. O al menos, así tendría que ser y así lo desea la mayoría de sus votantes.
Rajoy dedicó mucho tiempo a hablar de España. Sí, porque muchas veces, parece que este discurso no merece tanto tiempo para los partidos, cambiándose por otros temas que importan más en el día a día, como la inmigración, la economía o el terrorismo. Pero es que estos temas, están influyendo en el propio nucleo del concepto de nación, especialmente, a través de esta reforma encubierta de la Constitución que se está dando. Habló con claridad en este tema.
Propuso dos cosas: consenso y reformas constitucionales.
Reformas, desde la lealtad a la Constitución, si bien ha mostrado fallos en temas como una excesiva descentralización. El ejemplo de Alemania o Italia, han sido elementos en los cuales, se reflejan este intento de recuperar poder, para mejorar la eficacia, palabra que sonó bastante durante estos discursos de clausura.
Consenso, tendiendo la mano al Gobierno. "Somos hijos del consenso", dijo. Aunque adelantó, que esto no le gustaría a todo el mundo. Sin duda es un debate donde el que tiene que dar pasos de acercamiento a la lealtad constitucional, es el actual gobierno. La mayoría de los socialista comparten estos valores que tienen como chasis del Estado, a la Constitución. Ójala que la dirección del actual gobierno, se acerque a esa orilla común, donde están la defensa de valores comunes a todos. Zapatero, tendría que estar más cerca de Rajoy que de Otegi. O al menos, así tendría que ser y así lo desea la mayoría de sus votantes.
Grabé el discurso final. Para escuchar el discurso de Rajoy, pincha aquí
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