"Un problema deja de serlo, si no tiene solución".Eduardo Mendoza. Escritor
Sigo a D. Aleix Vidal-Quadras, desde su blog, los artículos en la Razón y Época, o sus intervenciones como contertulio en Radio Intereconomía. A pesar de que pudiera parecer un "outsider", por motivos de su cargo en el Parlamento Europeo, hace un fino seguimiento al candente estado de nuestra política nacional. Algunos interpretan los cargos en Europa, como un cementerio de elefantes. El Partido Popular tiene a dos puntales de su política, situados en la eurocámara: me refiero a D. Jaime Mayor Oreja, además del propio D. Alejo. Curiosamente, ambos en regiones del puzzle autonómico, donde ZP ha empezado a quitar las fichas. Sin duda sería interesante recuperar el buen hacer político de ambos, para la política nacional.
En el caso de D. Alejo, su análisis impecable, disecciona las contradicciones del nacionalismo y descubre las vagabundas evocaciones de los nacionalistas, respecto a modelos políticos, históricos o geográficos, según interesen. Sus artículos, tienen una gran labor pedagógica en el tema del Estatuto de Cataluña, para la sociedad española y particularmente para la catalana. Él sabe manejar los conceptos jurídico-constitucionales precisos, mientras que nuestro presidente, aunque fuera profesor de derecho, prefiere hablar de la «democracia deliberativa» y demás aforismos "chorras", que figuran en la marquesina de este blog.
Me quedo con una acertada frase suya, que bien define al nacionalismo, como "una solución imposible, a un problema inexistente". Sopla un poco de tramontana bruselense, para despejar la viciada atmósfera de la política catalana.
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